LAS FALLAS
En este mes de marzo se celebra una de las fiestas más espectaculares y conocidas de España: las Fallas.
¿Qué son las Fallas?
Una tradición centenaria que, originalmente, celebraba la llegada de la primavera y el buen tiempo. En esta fiesta el fuego es el gran protagonista.
Las Fallas han sido nombradas Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. Son una celebración autóctona de la ciudad de Valencia donde se dan los eventos más famosos pero también se festejan en muchos pueblos de la Comunidad Valenciana.
Oficialmente comienzan el último fin de semana de febrero con un acto llamado “la crida” en valenciano (pregón en español), y se desarrollan durante el mes de marzo. El último y más importante de los días es el 19 de marzo, día de San José.
Su nombre proviene de “fax”, la palabra en valenciano para “antorcha”.
Orígen de las Fallas
Las Fallas pueden englobarse dentro de las tradiciones y celebraciones que se dan en toda España relacionadas con el fuego, como es la noche de San Juan.
En épocas anteriores al cristianismo, con la llegada del tiempo primaveral se encendían fuegos y hogueras para festejar el fin del invierno y del frío. Simbolizaba el triunfo del sol y la luz sobre la oscuridad. Aunque este origen no está confirmado por historiadores o sociólogos.
Por otra parte, el día más importante en estas fiestas es el 19 de marzo. Esto es así porque, según la versión popular del origen de las fallas, los carpinteros quemaban los restos de madera, virutas y otros objetos y así limpiar sus talleres en la noche del 19 de marzo. Eligieron esta noche por ser la festividad de San José, patrón de los carpinteros, y así honraban a su protector mientras se deshacían de todos aquellos objetos que ya no eran útiles.
Antiguamente, la celebración era única de carpinteros pero poco a poco toda la sociedad valenciana empezó a participar en los festejos. Los carpinteros vaciaban sus talleres y quemaban todos los elementos sobrantes en una hoguera. También quemaban los «parots”, estructuras de madera que se utilizaban para sostener los candiles e iluminar los talleres durante el invierno cuando los días son más cortos.
Con la llegada de la primavera, los días se alargan y ya no eran necesarios esos candiles. De la quema de estos “parots” es de donde viene la tradición de quemar una estatua antropomorfa, ya que poco a poco le fueron dando forma humana a estas estructuras de madera.
Con el tiempo además de las hogueras se fueron introduciendo elementos como los petardos, las mascletás y ya en época contemporánea, los fuegos artificiales.
Elementos importantes
Falleros y falleras
A lo largo de su historia, y hasta llegar a la actualidad, las Fallas han ido evolucionado. Pasó de ser una fiesta del los carpinteros para ser una fiesta de todos los valencianos y valencianas.
En cada barrio hay distintas agrupaciones falleras que colaboran con el artista fallero en la construcción de las enormes y bellas estatuas de madera. Normalmente suelen representar temas de actualidad y personajes famosos de la sociedad española o internacional, de manera satírica. A cada muñeco o personaje que forma la estatua se le denomina “ninot”. Estas estatuas pueden llegar hasta los 35 metros de altura, formando enormes estructuras que serán destruidas por el fuego. Las Fallas son instaladas en las calles los días 14 y 15 de marzo. La colocación de las Fallas es lo que se denomina como «la plantà».
Estos monumentos sólo podrán ser visibles hasta la noche del día 19 de marzo que se produce «la Cremá»
Esto hace de cada falla sea única e irrepetible.
La Cremá
“Cremá” en valenciano, o “quema” en español, es el momento en el que se queman las más de 1000 fallas que se construyen a lo largo y ancho de toda la ciudad. El fuego devora en cuestión de minutos las estructuras de madera en las que los valencianos han trabajado durante un año. Es un momento solemne pero a la vez espectacular, ya que la ciudad entera es iluminada por las llamas.
Solamente se salva de la quema un ninot. Las falleras mayores de cada falla proponen a un ninot y es por votación popular como se decide el único ninot que será salvado. Se traslada al Museo Fallero de Valencia.
Mascletá
Junto al fuego encontramos otros elementos igualmente importantes que llenan esta fiesta de ruido y color. Las “mascletás”, una composición sonora en la que se lanzan petardos y cohetes sin parar en el mismo lugar durante varios minutos y puede escucharse por toda la ciudad desde el primer día de marzo. Son las falleras mayores las encargadas de dar comienzo a la mascletá cada día.
En toda la ciudad suenan durante todas las fiestas los petardos, pequeños explosivos que tanto niños como adultos lanzan y utilizan como un juego, aunque hay siempre con ciudado ya que pueden ser peligrosos.
Finalmente, durante estas fechas se organizan durante la noche numerosos espectáculos de fuegos artificiales que iluminan el cielo y resuenan por toda la ciudad y hacen la delicia tanto de los valencianos como de los miles y miles de turistas que no quieren perder la oportunidad de participar en una fiesta tan increíble que todo el mundo debería participar, al menos una vez en la vida.
Escuela de español Berceo Salamanca.